«Las autoridades han torturado a varias mujeres y niñas y las han mantenido en detención prolongada en régimen de incomunicación. Por lo general, las detenciones tenían por objeto presionar a familiares varones sospechosos de tener vínculos con Wilayat Sina, filial del EI, para que se entregaran, u obtener información sobre ellos», según HRW y la ONG Sinai Foundation for Human Rights, con sede en el Reino Unido.
El subdirector para Oriente Medio y el Norte de África de HRW, Adam Coogle, señaló en un comunicado que «muchas mujeres y niñas en el norte del Sinaí ya han sufrido abusos intolerables a manos de miembros vinculados al EI», por lo que el Gobierno egipcio «debería protegerlas, no encerrarlas y torturarlas».
Desde julio de 2013, las operaciones militares egipcias se han intensificado en el norte del Sinaí contra Wilayat Sina, que prometió lealtad al EI en 2014 y, como consecuencia, las autoridades egipcias han convertido la región en una zona militar cerrada en la que está prohibido informar de forma independiente.
Tanto las fuerzas de seguridad egipcias como la filial del EI han violado gravemente el derecho internacional humanitario de formas que pueden equivaler a crímenes de guerra, denunciaron ambas ONG.
HRW y la Sinai Foundation for Human Rights documentaron 21 casos que tuvieron lugar entre 2017 y 2022 y que afectaron a 19 mujeres y dos niñas.
Los familiares de tres mujeres que fueron entrevistados afirmaron a las ONG que agentes de la Agencia de Seguridad Nacional egipcia abusaron de ellas en diversos lugares de la agencia, incluso con palizas y descargas eléctricas.
Otras dos mujeres dijeron que los agentes las maltrataron verbalmente, abofetearon a una en la cara y vendaron los ojos a otra en comisarías del norte del Sinaí, según las fuentes.
«Las autoridades egipcias han estado maltratando a muchas mujeres y niñas en el norte del Sinaí para obtener información sobre sus presuntos familiares afiliados al EI o presionar a estos sospechosos para que se entreguen», dijo en la nota el director ejecutivo del Sinai Foundation for Human Rights, Ahmed Salem.
Y agregó: «Las autoridades deben liberar de inmediato a todas las mujeres y niñas recluidas por el mero hecho de estar emparentadas o relacionadas con sospechosos varones, e investigar las torturas y otros malos tratos infligidos contra ellas».
La violencia ha disminuido en los últimos años y desde mediados de 2020, la filial del EI ha perdido gran parte de su bastión en el norte del Sinaí.