La Orión cayó en aguas del Océano Pacífico, frente a Baja California (México) a la hora prevista, sobre las 17.40 horas GMT, tras desplegar en la secuencia planificada un sistema de once paracaídas que le permitieron reducir las 325 millas por hora (523 km/h) de velocidad hasta poco menos de 20 millas por hora (32 km/h).
Tras la vuelta de hoy, los planes de la NASA son enviar la Artemis II en 2024 y al año siguiente la Artemis III, en la que los astronautas, entre ellos una mujer y un hombre de color, tocarían el suelo del satélite por primera vez desde 1972, cuando lo hicieron los enviados a la Luna con la misión Apolo XVII.