En la demanda, enviada al Ministerio Público, constan «hechos delictivos de faltas y delitos graves existentes en todos sus pilares y cometidos por Mustafa Sanalla, expresidente de la junta ejecutiva de la NOC», que se negó a aceptar el cese decretado por NOC el pasado martes.

Sanalla rechazó la autoridad del primer ministro del GUN, con sede en la capital, que el martes nombró a un nuevo dirigente de la petrolera, Farhat Omar Bingadara que hoy tomó posesión entre escaramuzas contra dos bandos políticos.

Estados Unidos expresó hoy su «profunda preocupación» por la crisis en la dirección de la NOC y pidió «evitar la confrontación armada»

Dbeiba, del GUN, se opuso en febrero a ceder el poder a Fathi Bashaga, designado primer ministro paralelo por el Parlamento, con sede en el este del país, controlado por el mariscal Jalifa Haftar, lo que ha devuelto al país a una división política.

El primer ministro del GUN acusó hoy a Sanalla de «acciones y comportamientos», que son «legalmente criminales de acuerdo con el Código Penal de Libia y las leyes que lo complementan, ya que apareció deliberadamente en los medios en contra el primer ministro y algunos otros funcionarios.»

Sanalla acusó ayer a Emiratos Árabes Unidos (EAU), que durante la pasada guerra civil apoyaba a las fuerzas del este del país, de un acuerdo con Dbeiba para controlar el petróleo libio y promover su dimisión.