La Prefectura (delegación del Gobierno) explicó en su cuenta de Twitter que la evacuación hacia el parque de exposiciones de La Teste de Buch se llevaba a cabo en autobuses y en coches y tenía un carácter «preventivo», lo que significa que las viviendas no están en peligro.
Según la prefectura, hasta las 13.00 locales (11.00 GMT) habían quedado calcinadas allí 2.100 hectáreas y otras tantas en el incendio que se había declarado también el martes en Landiras. Además, la situación a esa hora era «desfavorable».
Un millar de bomberos apoyados por un centenar de vehículos y seis aviones trabajan en la extinción del fuego en una jornada en que Gironde es uno de los siete departamentos franceses que están en alerta naranja por la ola de calor que afecta al sur de Francia, en particular por la fachada atlántica.
En la región de Nueva Aquitania, los servicios meteorológicos esperan este jueves máximas de 38 grados en Burdeos y de 40 en Mont de Marsan, en el vecino departamento de las Landas.
Desde el mismo martes, habían tenido que ser evacuadas 6.500 personas por los dos incendios, en su mayor parte de cámpings en torno al Bassin de Arcachon próximos a La Teste de Buch, una zona costera de gran interés turístico. Más allá de los daños materiales, no hay constancia de víctimas personales.