Zverev había eliminado a Djokovic en semifinales de los Juegos Olímpicos de Tokio, en los que ganó la medalla de oro. Ganador del Masters en 2018, buscará su segundo triunfo el domingo ante el vencedor de la pasada edición, el ruso Daniil Medvedev (2º).
“Ha sido un fantástico partido, creo que hemos jugado cinco veces este año y cada una de las veces fue una gran batalla, jugando mucho tiempo”, señaló Zverev.
El alemán elogió a su rival: “Para mí no hay nadie en el mundo que deba ser más respetado que Novak. De dónde viene, lo que ha logrado… Es el mejor jugador de todos los tiempos y creo que la gente lo olvida a veces”.
Minutos antes, Zverev se había mostrado más sólido que Djokovic en los momentos importantes. Tras un gran primer set, con los dos tenistas peleando cada golpe, el alemán se mostró mejor en el ‘tie-break’, después de que Djokovic desaprovechara una bola de set con 5-4.
Acusando el golpe, el serbio parecía por debajo en el segundo, pero fue capaz de lograr una rotura con 5-4 e igualó el partido. Pero incluso esta vez tuvo que sufrir, necesitando cinco bolas de set para empatar.
En el set decisivo Zverev hizo el primer ‘break’ gracias a dos errores no forzados con la derecha de Djokovic, que ya no fue capaz de recuperar su desventaja.
Medvedev, sin sufrir ante Ruud
En la primera semifinal Medvedev superó al noruego Casper Ruud (N.8) por 6-4 y 6-2.
Contra Ruud, debutante de 22 años, invitado sorpresa en semifinales, el ruso nunca estuvo contra las cuerdas. No concedió ni una bola de rotura y dictó el juego con sus grandes golpes de derecha, que hicieron sufrir al noruego en la superficie ultrarrápida de Turín, que se estrena como sede del Masters.
“Creo que Ruud es uno de los jugadores más inteligentes del circuito y este año estaba en semifinales en su primera participación. Yo en mi primera participación perdí mis tres primeros partidos”, recordó Medvedev.
Al principio del segundo set Ruud ofreció su mejor versión e intentó la remontada, como logró el viernes contra Andrey Rublev (N.5), pero esta vez el muro estaba demasiado alto.
Medvedev, que cerró el duelo en algo menos de una hora y 20 minutos, ganó su noveno partido consecutivo en el Masters, contando los cinco que le llevaron al triunfo el año pasado y los cuatro que lleva en la actual edición.