La mayoría de candidatos de la oposición de izquierda y centro-izquierda abogaron en un debate organizado por el canal local La Red por cambiar el modelo privado de agua, cuyo origen se remonta a la economía neoliberal instaurada durante la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990).
«Hoy día existe una institucionalidad hídrica que está al servicio de la industria extractiva y que no se corresponde con la disponibilidad hídrica real. De las 101 cuencas que tenemos, más de 90 están absolutamente sobreexplotadas», indicó el diputado y candidato del bloque izquierdista Frente Amplio, Gabriel Boric, quien va primero en las encuestas.
«No tengo ninguna duda en que el cambio en esta materia es urgente, que la crisis hídrica es ineludible. La prioridad de nuestro gobierno será asegurar el agua para las personas y los ecosistemas», agregó.
«La primera prioridad es entregar soluciones de agua potable y saneamiento rural. En el acceso al agua, nuestro principal foco son las personas», señaló por su parte la democristiana Yasna Provoste.
«Nos parece muy importante avanzar en la ley de glaciares. Tenemos que ser capaces de cuidar nuestras reservas de agua», apuntó además la expresidenta del Senado chileno.
En tanto, la carta oficialista y exministro del actual gobierno, Sebastián Sichel, afirmó la necesidad de «avanzar en el proyecto que crea la subsecretaría del agua, pero además avanzar en la creación de una agencia independiente que administre el agua .No hay instituciones poderosas para generar políticas públicas».
Chile, que vive su peor sequía en seis décadas, es el país con la mayor crisis hídrica de todo el hemisferio occidental, según Greenpeace.
La situación es especialmente crítica en la zona central, donde miles de habitantes reciben agua diariamente gracias a camiones aljibes y este año se registraron máximas récord en julio que rozaron los 30 grados en pleno invierno.
El Gobierno ha decretado este año la emergencia agrícola en las regiones de Coquimbo, Valparaíso, O’Higgins, Maule y Metropolitana, que alberga la capital y donde viven 8 de los 19 millones de habitantes del país.
Las organizaciones ecologistas denuncian que el modelo de agua ha agravado la sequía que vive el país como consecuencia de la crisis climática, pues Chile es uno de los países con el mayor nivel de privatización del mundo, con el 80 % de los recursos hídricos del país en manos privadas.
En el debate, no participaron ni el ultraderechista José Antonio Kast, a quien algunos sondeos aupan al segundo lugar; ni Eduardo Artés, representante de una izquierda más radical; ni Franco Parisi, un polémico economista liberal que reside en Estados Unidos.
En el caso de que ningún de los siete contendientes logre más de la mitad de los votos en los comicios del 21 de noviembre -algo que se da casi por sentado-, se celebrará una segunda vuelta el 19 de diciembre.
La persona que llegue a La Moneda (sede de Gobierno) tendrá que reencauzar un país que vivió en 2019 graves protestas e implementar las normas de la nueva Constitución, que se comenzó a redactar el pasado julio y que debe ser refrendada en un plebiscito de salida, previsiblemente en 2022.