Mesto confirmó durante un encuentro con la prensa «que no hay planes para operar vuelos directos entre Jordania y Siria, o viceversa, en este momento», informó la agencia oficial de noticias jordana, Petra.

La reanudación de los vuelos por parte de la aerolínea Royal Jordanian había sido una de las medidas adoptadas durante un encuentro entre cuatro ministros sirios y sus homólogos jordanos en Amán a finales de septiembre, según anunció entonces Azayzeh.

El ministro precisó incluso que los vuelos comenzarían el día 3 de octubre.

Sin embargo, ya entonces, Royal Jordanian advirtió en un comunicado de que antes debían recibir la autorización de las autoridades competentes, algo que, con las palabras de Mesto, queda descartado por el momento.

La reunión de ministros de ambos países y el anuncio de la reanudación de vuelos se sumaron a otros pasos que apuntan a una normalización de las relaciones bilaterales tras una década en el que el presidente sirio, Bachar al Asad, ha sido marginado por los países vecinos a raíz del conflicto interno iniciado en 2011 que derivó en una guerra civil.

El paso más significativo hacia esta distensión fue una llamada telefónica entre Al Asad y el rey de Jordania, Abdalá I, el mismo 3 de octubre, de la que se informó en ambas capitales.

Sin embargo, el pasado miércoles el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, aseguró en una rueda de prensa en Washington que su Gobierno no apoyaría ningún intento de normalización de las relaciones con el Gobierno de Al Asad, contra el que ha aprobado diversas sanciones.