Pese a que estos dos factores sustentaron el pesimismo durante toda la semana en el mayor mercado bursátil latinoamericano, el Ibovespa acumuló en los últimos siete días una subida del 1,65 % con respecto a los 111.439 puntos con que cerró el viernes de la semana pasada, cuando estaba en su menor nivel en seis meses.
Igualmente por el temor a los efectos que la crisis de Evergrande puede tener en la economía mundial y a la posibilidad de que Brasil tenga que elevar aún más sus intereses por la falta de control de la inflación, el real mantuvo su tendencia de pérdida de valor.
En el mercado de cambio, el dólar se apreció hoy un 0,65 % frente al real y cerró negociado a 5,347 reales tanto para la compra como para la venta el en tipo de cambio comercial de Brasil.
En las cinco sesiones de la semana, la moneda estadounidense acumuló una apreciación del 1,15 %, ya que el viernes de la semana pasada cerró cotizada a 5,286 reales.
El temor a una crisis en el sector inmobiliario a nivel global provocado por la posible quiebra de Evergrande hizo con que el Ibovespa cayera el pasado lunes hasta 108.843 puntos, su menor nivel desde diciembre del año pasado.
Pero los temores se fueron disipando y el Ibovespa se recuperó martes, miércoles y jueves con tres subidas consecutivas. Sin embargo, como Evergrande no consiguió pagar parte de la deuda que vencía el viernes, las alarmas se encendieron de nuevo y, con los inversores vendiendo, la plaza volvió a cerrar en negativo.
El otro factor que viene alimentando el pesimismo entre los inversores en Brasil es la inflación, algo que se agravó este viernes con la divulgación de que el índice de precios previo medido en septiembre fue del 1,14 %, su mayor nivel en varios meses, lo que ubicó la inflación acumulada en Brasil en los últimos doce meses en 10,05 %, el triple de la meta que se impuso el Gobierno.
Con la inflación fuera de control, el temor de los inversores es que el Banco Central decida acelerar aún más el proceso gradual de elevación de los intereses para encarecer el costo del dinero, dificultar el crédito y forzar la reducción de los precios.
El emisor elevó la tasa básica de intereses el miércoles hasta 6,25 % al año, su mayor nivel en más de dos años, y admitió que Brasil puede cerrar 2021 con los tipos por encima del 8,5 % anual, pero los inversores temen que el Banco Central se vea obligado a elevar los intereses por encima de ese nivel.
Los temores generados por China afectaron este viernes principalmente las acciones de las siderúrgicas y de la minera Vale, una de las mayores productoras mundiales de hierro y cuyo principal cliente es el gigante asiático.
Las acciones ordinarias de Vale, que fueron las más negociadas en la jornada, cerraron este viernes con una caída del 1,55 %.
Los papeles del Ibovespa que más perdieron valor este viernes fueron los ordinarios de Meliuz, una startup brasileña creada en 2011 y que ofrece gratuitamente en su plataforma cupones de descuentos en tiendas virtuales, con un desplome del 7,09 %.
Enseguida, entre las mayores caídas de la jornada, se ubicaron las acciones ordinarias de la Siderúrgica Nacional, con una depreciación del 3,59 %; las ordinarias de la red de tiendas Americanas (-3,55 %) y las del fabricante de cosméticos Natura (-2,92 %).
Los papeles del Ibovespa que cerraron con las mayores subidas fueron los ordinarios del exportador de carnes Minerva (+4,52 %), los ordinarios de la petrolera Petrorio (+3,87 %) y los ordinarios de las también productoras y exportadores de carne JBS (+3,72 %) y BRF (2,68 %).
Durante la jornada se negociaron 25.777,6 millones de reales (unos 4.820,9 millones de dólares), producto de 3.509.435 transacciones financieras.