“Queda claro que la lista no tiene NADA que ver con ‘corrupción’, sino que es pura política e injerencia de la más bajera (baja)”, publicó el mandatario en su Twitter tras conocerse la actualización de la lista.
Añadió que «es extraño que no viene mencionado NADIE de la oposición. Tal vez por angelitos» y «de nuevo, no viene NADIE del Gobierno de Honduras».
El secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, envió al Congreso de la nación norteamericana una actualización de la «Lista de Actores Corruptos y Antidemocráticos».
En esta se incluye a los abogados Óscar Alberto López Jerez, Elsy Dueñas Lovos, José Ángel Pérez Chacón, Luis Javier Suárez Magaña y Héctor Nahún Martínez.
A juicio del Gobierno estadounidense estas personas «socavaron los procesos o las instituciones democráticas».
Los magistrados, entre los que se encuentran un exasesor del Gobierno de Bukele y un abogado del director de la Policía Nacional Civil (PNC), fueron nombrados el 1 de mayo pasado después de que la Asamblea Legislativa, de mayoría oficialista, cesara a los jueces que formaban parte de dicha sala.
«Los cinco magistrados están incluidos por aceptar nombramientos directos en la Sala por parte de la Asamblea Legislativa, en un proceso inusual y en aparente contravención a los procesos establecidos en el artículo 186 de la Constitución», indicó la Embajada de EE.UU. en un comunicado.
Añadió que «los cinco magistrados anteriores fueron destituidos abruptamente sin causa legítima tras la toma de posesión de la nueva Asamblea Legislativa».
«Los Magistrados también socavaron los procesos o las instituciones democráticas al aprobar una controvertida interpretación de la Constitución que autorizaba la reelección del presidente, a pesar de la prohibición expresa en la Constitución de los mandatos consecutivos de la Presidencia», agregó.
Bukele acusó el pasado 15 de septiembre a «países amigos» de la comunidad internacional de financiar a la oposición, sin presentar pruebas, y manifestó que no permitirá «injerencia de ningún tipo».
Ese mismo día, miles de salvadoreños protestaron en las calles de la capital contra Bukele y una deriva «autoritaria» que vienen denunciando diferentes sectores.
A pesar de negar en varias ocasiones que en El Salvador exista una dictadura, el mandatario cambió la noche del domingo su biografía en Twitter y se describió como “Dictador de El Salvador”.