Según datos del ministerio de Sanidad en las últimas 24 horas se registraron 722 nuevos casos de coronavirus en el país y se certificaron 10 fallecimientos por esta causa.

El gobierno detectó que el alza en las infecciones se acentúa en las provincias con la tasa de vacunación más baja: Lublin (este), Podlaquia (nordeste) y Subcarpacia (sudeste).

El número de hospitalizados también aumentó en 58 personas y son ya 881 los pacientes ingresados por covid-19, de los cuales 95 están en estado crítico y requieren ventilación asistida.

El gobierno polaco avisa de una inminente «cuarta ola» de infecciones para este otoño y exhorta a la población que aún no se ha vacunado a que lo haga, aunque asegura que los hospitales y el personal sanitario «están preparados» para afrontar un incremento de casos y recuerda que aún se dispone de casi 590 ventiladores libres.

Según datos oficiales, más de 19 millones de personas, aproximadamente el 50 % de la población, han sido vacunadas por completo, si bien se ha detectado un descenso en las inscripciones de ciudadanos para vacunarse voluntariamente.

Por otro lado, aumenta la posibilidad de una huelga nacional de médicos y personal sanitario tras la negativa de los representantes sindicales a reunirse con el ministro de Sanidad, Adam Niedzielski, o el recién nombrado viceministro Piotr Bromber, que fue designado como interlocutor para las negociaciones.

El comité de trabajadores sanitarios ha confirmado que no asistirá a la reunión programada para este jueves a no ser que asista el primer ministro, Mateusz Morawiecki, quien a su vez declaró que no se sentará a negociar hasta que las reivindicaciones planteadas sean «realistas».

Los médicos y trabajadores del sector sanitario piden, entre otras cosas, mejoras salariales y ser reconocidos como funcionarios públicos, además de exigir nuevas contrataciones para atenuar la carga de trabajo a que se ven sometidos.

El coste económico de estas peticiones supondría unos 5.700 millones de euros este año y otros 22.500 en 2022, una cifra que el ministro Niedzielski comparó con «mandar un cohete a Marte».

Polonia tiene 2,2 médicos por cada mil habitantes, la proporción más baja de toda la Unión Europea.