El último partido de Federico Santander fue el 27 de octubre del 2020, cuando el Bologna chocó con Regina por Copa Italia. El lunes volvió a tener minutos luego de una larga inactividad provocada por la lesión de rodilla que padeció.
“La idea es ir de a poco. La operación no fue fácil. Yo me aloqué en un partido y jugué con la rodilla rota. Y ahí rompí todo”, manifestó el paraguayo en charla con el Cardinal Deportivo. Recordó que en ese momento “no sabía, no sentía que la rodilla estaba rota”.
“Estaba agarrando ritmo en la pretemporada pero la rodilla aún no estaba en su punto. Falta hacerle algunas cosas. Con los amistosos que estaba haciendo me sentía mejor. Ayer jugué cinco a seis minutos”, resaltó.
Santander ingresó cuando se jugaba el segundo minuto de adición en el triunfo del Bologna frente al Hellas Verona. El Ropero reemplazó a a Marko Arnautović. En la fecha pasada ya estuvo en el banco de suplentes y ahora se enfoca en el compromiso siguiente, frente al Internazionale.