Rika Aprianti, portavoz del departamento de correccionales del Ministerio de Justicia, confirmó hoy que tres personas fallecieron en el hospital y se suman a las 41 muertes confirmadas ayer, recoge el portal de noticias Republika.
Además, una treintena de presos resultaron heridos por las llamas y han sido trasladados a diferentes centros sanitarios.
Los responsables de la prisión indicaron que el fuego se inició en la madrugada del miércoles, supuestamente a raíz de un fallo eléctrico, en el Bloque C del recinto penitenciario, designado para los reos con delitos de drogas y donde en el momento del incidente se encontraban al menos 122 personas.
Las autoridades han reconocido el problema por la saturación de este penal, construido en 1972 para alojar a unos 600 reclusos y que actualmente alojaba a más de 2.000 internos.
El suceso también ha provocado que las autoridades reconsideren las duras leyes sobre narcóticos, que castigan con penas de cárcel hasta el consumo propio y lo que causa un desproporcionado alto número de reclusos con delitos de droga en las prisiones del país.
El ministro coordinador de Asuntos Políticos, Legales y de Seguridad, Mahfud Md, indicó este jueves tras visitar la víspera la prisión Tangerang que se plantean reformar la ley para enviar a los consumidores de drogas a centros de rehabilitación en lugar de a prisión, recoge el medio indonesio Tempo.