“Se confirma diagnóstico de covid al periodista Roland Carreño”, escribió la abogada Ana Leonor Acosta en su cuenta de Twitter, donde previamente había informado que se encontraba en la emergencia con su defendido, quien ya tenía una “crisis hipertensiva aguda y dificultad para respirar”, así como fiebre y malestar.
Por su parte, la también abogada María Alejandra Poleo escribió en la misma red social que Carreño “fue traslado de urgencia” al Hospital Clínico de Caracas, un mensaje replicado por Voluntad Popular, partido que lidera López y del que forma parte Carreño.
Poco antes, la esposa del opositor Juan Guaidó, Fabiana Rosales, alertó del “agravamiento de la salud” del comunicador.
“Hace 11 días presentó una crisis hipertensiva y no ha sido evaluado por su médico de confianza”, escribió en Twitter, donde denunció que “el tribunal que lo mantiene preso” no daba respuesta a la solicitud.
La Fiscalía y el tribunal del caso coinciden en apuntar que el periodista fue detenido “en flagrancia”, pues en el momento del arresto “se le incautó un fusil desarmado modelo AM-15 calibre 5.56 con 17 municiones”, según informó en octubre de 2020 el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ).
Al periodista se le imputó la comisión de los delitos de financiamiento al terrorismo, conspiración contra la forma política y tráfico ilícito de armas de guerra.
Posteriormente, su defensa informó que también fue acusado de “asociación para delinquir”.
Además, el fiscal general, Tarek William Saab, aseguró que Carreño “es el principal” financiero de Voluntad Popular y que al momento de su detención llevaba consigo 12.000 dólares en efectivo, mientras que hallaron en su móvil conversaciones que daban cuenta del reparto de otros 60.000 dólares para actos de “conspiración”.