«Existe coordinación con la parte afgana sobre (la fecha) del anuncio de la apertura y operación de vuelos», explicó el jefe de la misión diplomática catarí en declaraciones desde la pista del aeropuerto de Kabul y retransmitido por la cadena catarí Al Yazira.
Señaló que el equipo técnico enviado por Catar para ayudar a operar el aeropuerto de la capital afgana, paralizado tras la salida de los últimos soldados de Estados Unidos el pasado 31 de agosto, «ha completado todos los preparativos técnicos y el aeropuerto está casi listo para recibir vuelos internacionales», sin dar más detalles.
«Puedo decir que sólo faltan los últimos retoques», agregó el embajador, cuyo país anunció hace tres días el establecimiento de un corredor humanitario a Afganistán.
Catar ha llevado a cabo conversaciones con los talibanes con el objetivo de llegar a un acuerdo para ofrecerles asistencia técnica en la operación del aeropuerto de Kabul a petición de la Autoridad de Aviación Civil afgana.
Asimismo, Catar ha enviado hoy un cargamento de 25 toneladas de ayuda humanitaria por tercer día consecutivo, después de que otros dos aviones aterrizaran en los pasados dos días con más de 40 toneladas de productos básicos, alimentos y suministros médicos.
Estas declaraciones se producen en un momento en el que Catar espera al secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, y cuya llegada está prevista para hoy para reunirse con el emir, Tamim bin Hamad al Zani, y con el viceprimer ministro y homólogo catarí, Mohamed bin Abderrahman al Zani para dar las gracias por el rol que han desempeñado en la evacuación.
Catar acoge desde hace años una oficina política de los talibanes y ha ejercido como mediador en las negociaciones intraafganas, a la vez que mantiene una buena relación con Washington, hasta el punto de hospedar la principal base militar estadounidense en el golfo Pérsico.
Esa base fue uno de los principales puntos de tránsito de los vuelos de evacuación de ciudadanos extranjeros y afganos de Kabul en la segunda mitad de agosto.