“Rechazamos la situación actual que podría conducir a un enfrentamiento antinatural, un enfrentamiento que no es sino una negación de la historia profunda de nuestra región, que va en contra de los intereses de los dos pueblos y de toda la región”, se indica en el manifiesto firmado por intelectuales y activistas de Marruecos, Argelia y Túnez, y presentado en una rueda de prensa que combinó entre un formato presencial y virtual.
El economista y activista marroquí, Fouad Abdelmoumni, señaló que en este llamamiento los firmantes piden a la sociedad civil de ambos países actuar rápidamente para poner fin a la escalada de tensión, así como añadió que este acto simbólico será seguido por otros para abordar las cuestiones espinosas que causan la división entre los dos países magrebíes.
En el mismo sentido, el activista bereber marroquí, Ahmed Assid, propone la celebración de encuentros entre las élites de Marruecos y Argelia para favorecer el entendimiento entre ambos países.
Por su parte, Bencheikh Madjid, profesor universitario de derecho en Argelia, denunció que los gobernantes en ambos países “tienen un espíritu de dominación en la región que perjudica los intereses de los dos pueblos”.
Argelia anunció el pasado 24 de agosto la ruptura de relaciones con Marruecos -país con quien mantiene una vieja rivalidad- tras acusar a este último de apoyar el movimiento separatista de la Cabilia (MAK) y de estar detrás de las declaraciones del ministro de Exteriores israelí que acusó a Argel de ser cómplice de Irán.
“Esta ruptura es una catástrofe, ¿qué pasaría si surgen nuevos incidentes entre los dos países?”, deploró el economista argelino Lakhdari Djaffa.